A propósito de las detenciones de dos hermanos del pasado presidente Danilo Medina, Alexis y Magaly Medina Sánchez, entre una docena de ex funcionarios involucrados en escandalosos casos de corrupción, según las acusaciones de la Procuraduría Especializada en la Persecución de la Corrupción (Pepca), la primera pregunta que asalta a cualquier observador es la siguiente: ¿desconocía Danilo Medina las actividades ilícitas de sus parientes?
¿Cómo es posible que un entramado societario de tal envergadura permaneciera activo, sin ser descubierto, durante los dos periodos del mandatario?
Y los organismos de seguridad del Estado. ¿Acaso no son los encargados de convertir al jefe del Estado en la persona mejor informada de la República Dominicana, la cual incluye suministrarle los resúmenes diarios de lo que acontece dentro y fuera del gobierno?
Confío en que Medina no sabia lo que acontecía con los presupuestos, la compras y contrataciones llevadas a cabo en muchas dependencias del Ejecutivo, pero admito que es difícil de creer. Hace tiempo Alexis Medina Sánchez era el centro de rumores y la comidilla del publico, particularmente después que adquirió un jet privado, cuya fotografía mostraba en las redes sociales, y debido al dispendioso estilo de vida social que disfrutaba. Si el ex presidente Medina tampoco sabía esos detalles, ha sido el mandatario más despistado de la historia reciente.
Si finalmente sus hermanos son condenados en los tribunales, la reputación moral del ex mandatario será la primera en quedar profundamente maltratada.
