La anunciada contraofensiva ucraniana es ya una realidad. El Ejército afirma haber recuperado ya tres localidades. Parecen centrarse en el suroeste de Donetsk y en la región de Zaporiyia. Mientras, Rusia tampoco descansa.
El líder de los mercenarios Wagner ha escenificado un nuevo desencuentro con el Ministerio de Defensa ruso. Mientras, Rusia y Ucrania han intercambiado cerca de 200 prisioneros. Los ucranianos han llegado en autobús y algunos con heridas serias.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha difundido unas imágenes en donde se puede observar la destrucción de varios vehículos de combate ucranio durante ataques con dron. Estas serían las pruebas que demostrarían, según Rusia, que la contraofensiva de Ucrania para recuperar territorio a Rusia habrían «fracasado».
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha confirmado “acciones contraofensivas”, aunque ha rechazado dar detalles sobre la etapa en la que se encuentran. Estas declaraciones las ha hecho durante una comparecencia junto con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, quien ha viajado a Kiev para reunirse con Zelenski. Durante la visita el mandatario canadiense ha anunciado un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania, valorado en 500 millones de dólares. Desde el inicio de la guerra, la nación norteamericana habría enviado más de 8.000 millones de dólares en ayuda militar y humanitaria.
Además, los ataques no cesan. La ciudad de Odesa ha sido el último de una serie de ataques rusos con drones. Tres civiles han muerto y una veintena han resultado heridos. Las autoridades rusas han confirmado que habrían destruido un complejo militar ucranio.